Emy, la ilusión y la pasión | Jose, la lógica y el método.
Paula e Iker, nuestros sobrinos, son los culpables de esta aventura.
Hace unos años Jose insistió en hacer las monas de nuestros sobrinos. Compramos todo lo necesario para nuestro reto…la verdad es que el resultado no fue nada bueno jijiji, y como somos tan cabezotas (Jose) y perfeccionistas (Emy) nuestro reto se convirtió en nuestra afición, nuestra afición en un proyecto y nuestro proyecto en Dulce Emy.
Las monas de Pascua de mis sobrinos fueron un auténtico caos… pero dicen que del caos surgen ideas brillantes jijijiji. No sé si obsesionarme porque una tarta me saliera perfecta fue una idea brillante… lo que sí que sé es que fue el comienzo de algo maravilloso: mi amor por la repostería.
Como un herrero forja su espada, yo empecé a forjar un nuevo futuro, uno en el que mi afición se convertiría en mi trabajo. Empezaron meses de locura combinando, trabajo, formación y las primeras tartas para familiares y amigos. Ellos me apoyaron y animaron en todo momento y a ellos les debo lo que ahora es y será siempre Dulce Emy.
La visión de Jose, A mí me liaron ¿o fui yo el liante? Jijiji . Lo que sé es que algunos años después aquí estamos, contagiado por la ilusión que conlleva iniciar un proyecto. Un proyecto en el que poco a poco me he ido involucrando de tal manera que mi apoyo y ayuda en logística y decoración es un gran pilar para Dulce Emy ( o eso dice Emy jijiji).